sábado, 9 de noviembre de 2013

El último Stanislavsky (Maria Ósipovna Knébel)

 


El libro El último Stanislavsky está escrito por Maria Ósipovna Knébel, alumna de Stanislavsky, la cuál nos cuenta una serie de correcciones sobre el método que hizo Stanislavsky sobre la práctica y sobre cuestiones teatrales que no habían quedado muy claras o definidas. Se hacen aportaciones nuevas que no aparecen en los libros de Stanislavsky; la preparación del actor y la construcción del personaje, aunque sean escasas las nuevas aportaciones, ya que más que para aportarnos cosas nos sirve para dejar más claro el concepto que Stanislavsky tenía del teatro y de cómo trabajarlo.

Los conceptos que se exponen no son dogmas, ni obligatorios, sino simplemente son otra posibilidad para quien le sirva, aunque desde mi punto de vista son correctos y necesarios para el realismo teatral.

Hay conceptos que en este libro tienen otra traducción que Ósipovna ha visto más correctos, que en los libros de Stanislavsky que he citado anteriormente, como por ejemplo; a la línea continua de acción le llama acción transversal y el superobjetivo lo traduce como supertarea.

El último Stanislavsky es un libro teórico sobre el método bastante breve y light , pero eficaz para asentar los conocimientos que ya tienes de Constantin , porque leértelo sin haber leído anteriormente nada de Stanislavsky no tiene sentido.

Dubte (Sílvia Munt)



Una obra clave del teatro contemporáneo americano de John Patrick Shanley que llega al Teatro Poliorama dirigida por Sílvia Munt. El montaje teatral cuenta con unos protagonistas excepcionales: Rosa Maria Sardà, Ramon Madaula, Nora Navas y Mar Ulldemolins.

El texto de Dubte, narra como una monja de una escuela de los años 60 en el Bronx esparce la sospecha que el padre del barrio abusa sexualmente de un alumno. Dubte es un texto inteligente y trepidante que habla sobre la raíz de la incertidumbre y sobre la naturaleza misma de la verdad, las mil caras de la verdad que a menudo se construyen sobre la cómoda base de los prejuicios. Es un bombardeo de preguntas sin respuestas, una batería de interrogantes que otorga un espacio insólito a la subjetividad de cada cual.

Dubte se ha podido ver a los escenarios de todo el mundo: Singapur, Australia, Francia, Polonia, Venezuela… y ha recibido un gran número de premios entre los que destacan el Pulitzer de teatro y el Tony a la mejor obra de artes escénicas.

La obra también fue llevada a la gran pantalla en el año 2008 con Meryl Streep como protagonista.





Páginas utilizadas para crear esta entrada: 

Más información en: http://www.teatrepoliorama.com/

Roma, città aperta (Roberto Rossellini)


Septiembre de 1943, plena Segunda Guerra Mundial. Roma, antes controlada por las tropas de Mussolini, era declarada “ciudad abierta” tras el derrocamiento del líder fascista. En el mismo mes, el ejército nazi ocupaba la ciudad, comenzando un período de opresión y dolor en la historia de la ciudad eterna que finalizaría el 4 de abril de 1944, con la liberación de la ciudad por parte de las fuerzas aliadas. Son estos siete meses de sufrimiento el marco en el que encuadramos las historias que nos cuenta Roma, città aperta: un líder de la Resistencia perseguido por la Gestapo (Marcelo Pagliero), un sacerdote que colabora con los resistentes movido por su caridad cristiana (Aldo Fabrizi), una mujer valiente que no teme dar la cara por su futuro esposo (Anna Magniani), un oficial nazi que cree poder controlar la ciudad de Roma desde una oficina mediante mapas y fotos (Harry Feist). Nos encontramos frente a una de las obras cumbre del director italiano Roberto Rosselini, precursor de un estilo que él mismo inauguró casi por casualidad: el neorrealismo.





Con Roma ciudad abierta, Roberto Rossellini se luce con una gran obra maestra, dirigida con gran realismo y crudeza, en la que los efectos son conseguidos para la época y los movimientos de cámara magníficos.

La fotografía, vestuarios y decorados evocan perfectamente a la Italia de la segunda guerra mundial, la música marca los momentos de acción y la narrativa es sin lugar a dudas hipnotizadora al igual que el argumento que te mantiene pegado al asiento de principio a fin.

El ritmo es apropiado y las actuaciones sin lugar a dudas inmejorables, en especial la de Aldo Fabrizi que hace un papel inolvidable y lleno de dramatismo, por lo que sin lugar a dudas es una cinta que no se deben perder los amantes del cine clásico y realista, así como los amantes del buen cine en general.
Una película emocionante, que sorteando maniqueísmos y patrioterismo, sin manipular, nos acerca la imagen de la lucha y la esperanza. Si el arte debe emocionar, si no es esclavo del dinero, estamos ante arte con mayúsculas.


Niágara (Henry Hathaway)


George Loomis (Joseph Cotten) y su esposa Rose Loomis (Marilyn Monroe) pasan unas vacaciones en un motel junto a las Cataratas de Niagara. Su relación empeora rápidamente. Conocen a unos vecinos Ray Cutler (Max Showalter) y Polly Cutler (Jean Peters) que están pasando su luna de miel en la habitación contigua. Polly descubre que Rose tiene un amante, Patrick (Richard Allan), pero no sabe que ambos tienen un plan para deshacerse de George.







Película melodramática y de suspense en la que Marilyn aparece en una de las más sensuales interpretaciones de su carrera, provocando con su infidelidad un ambiente enrarecido en todo el desarrollo del film.
Las cataratas actúan aquí como uno más de los personajes, hasta el punto de crear una atmósfera claustrofóbica a pesar de estar ambientada en plena naturaleza.
La trama dramática, tan intensa, causa una suerte de dualidad psicológica entre la obsesión y celos del personaje interpretado por Joseph Cotten, muy alejado aquí de papeles como el de “Ciudadano Kane” o el de “Duelo Al Sol”.
Con una excepcional fotografía, la cinta destaca por las bellas presencias femeninas de Marilyn y de una sensacional Jean Peters, retratada aquí como la fémina correcta y decente en clara oposición al personaje de Marilyn, la femme fatale que aboca al abismo de modo irremediable.

En síntesis se trata de una película muy entretenida con hermosos paisajes de las imponentes cataratas del Niágara y un argumento de suspense adornado hábilmente por la belleza y erotismo de la protagonista dentro un atractivo reparto.